Hubo una época en la que David Janer (51) era un fenómeno de masas en toda regla. El boom le llegó al meterse en la piel de Gonzalo de Montalvo en Águila Rojacon el que encandiló los corazones de millones de fans y poco después llegó el rol de Guillermo Galán Barrios en Amar es para siempre. A raíz de este culebrón, el actor catalán abrió su cuenta en Instagram, algo inaudito porque siempre ha preferido mantenerse en un muy discreto segundo plano. Pero lo hizo por sus fans.
Este año cumple sus bodas de plata con la industria del entretenimiento. La pasión ha sido el motor para alcanzar lo que ha conseguido en la vida y por muchos tropezones que haya dado, tarde o temprano ha conseguido sus metas. Inquieto y con ganas de seguir formándose, se licenció en Filosofía porque siempre le ha interesado el porqué de las cosas y, posteriormente, estudió sumillería en el CETT de Barcelona (Barcelona School of Tourism, Hospitality and Gastronomy).
Aunque a simple vista parezca que no hay relación entre estas dos disciplinas, lo cierto es que David quedó entusiasmado por el papel de vital importancia que tenía el vino en la cultura griega y romana. De ahí que tras obtener la visión histórica y filosófica decidiera ampliarla con una más hedonista y práctica.
Tras haber hecho un buen maridaje de conocimientos, el actor ha rodado la serie documental Enológicasobre el universo vitivinícola que Amazon Prime Video ha estrenado. En cada capítulo sumergirá a la audiencia en los misterios existentes en la creación de este caldo.
Ya no está tan centrado en la actuación, aunque no por ello la ha abandonado. Quiere seguir experimentando para ofrecer otro tipo de narrativas poco vistas hasta la fecha. Para ello también echa mano a sus conocimientos como auxiliar administrativo en informática y técnico especialista en informática de gestión, que a priori iban a ser su modus vivendi antes de que lo diera todo por la actuación. A su padre le hizo la promesa de formarse bien y que no tomaría decisiones precipitadas hasta llegar a los 25. Y cumplió.
En cuanto a amores, David ha preferido ser discreto en la medida de lo posible. Su única pareja conocida ha sido la periodista Sandra Sabatés, con quien empezó a salir en 2012 cuando él estaba en Águila Roja y ella en El Intermedio, pero cuatro años después rompieron. Hasta donde se ha podido averiguar, David sigue soltero y sin hijos.